JESUS LOPEZ ZULUETA

DIALOGANDO CON LA NATURALEZA

Cada uno de los seres vivos, que denominamos como domésticos, llegan preparados a este mundo, con sus diferentes habilidades y valores para interactuar con los humanos. De ellos recibimos préstamo y servidumbre, nosotros les correspondemos dándoles alimento, techo y cuidados.

Cuantas veces ha recorrido por nuestra mente la clásica estampa de un equino, con el costal debajo de su morral, quieto como una escultura, si acaso, moviendo de vez en cuando el rabo para espantar alguna mosca.

Están esperando, pacientemente, recibir la esperada mercancia sobre su lomo y poner a prueba una de sus capacidades, que es la de tracción, llevar carga y portar pesos.

Los humanos también nos diferenciamos, unos a otros, en capacidades, valores y habilidades con la finalidad de responder y atender a otros seres de diferentes campos que derivan de la orografía, fauna y flora, para culminar y repetir nuevamente ese sentido natural y vital de prestación y servicio.

Dicho en metáfora: Los altos y las altas cuidan y atienden los perales, los que son medianos y medianas cuidan y atienden las zarzas de moras, los bajos y las bajas cuidan y atienden las plantas de fresas.

Si viéramos estas diferencias y valores como propias de una creación de la naturaleza y no como una evolución casual de los humanos, estaríamos más proyectados a conseguir un mundo más feliz y más justo.

La naturaleza es nuestro mejor aliado, si la observamos con atención, nos haremos preguntas y en este diálogo con ella, recibiremos respuestas, conocimiento y sabiduría.

Jesús López Zulueta. (2020/2021)

ESPIRITUALIDAD

Donde quiera que mires, se siente la espiritualidad. La espiritualidad es espacial, del cosmos, se encuentra en la izquierda, en la derecha, en el centro, arriba y abajo.

Al abrir tus ojos, todo aquello que veas, que se mueve, es que tiene vida, ahí está la espiritualidad. La espiritualidad es vida, por tanto, también está en ti, son tus sentidos, aquello que amas, tus deseos, tu sonrisa, tus buenos días que das y deseas a quien te cruzas en el camino, tus pensamientos y comentarios, lo que deseas decir es la espiritualidad.

Es la atracción natural por el buen cuidado de los seres y las cosas. La espiritualidad es inherente a los cuerpos vivos, es la dualidad de todo aquello que se mueve, de no ser así, todo sería un sin sentido, seríamos un simple pedrusko.

Reflexión para mi exposición en la Taberna Aterpe (Beasain) 

Jesús López Zulueta. Octubre 2023